Estaba programada para este fin de semana la visita a mis casas rurales de un grupo de amig@s llegados desde Valladolid y tierras más lejanas, París y Texas. A todos nos une además de la amistad entre otras cosas, nuestra gran afición por la cultura del vino. Enseguida surgió la idea de aprovechar la ocasión para visitar alguna bodega berciana y realizar alguna cata de sus ricos caldos.
Así que nos nos hemos pegado el gustazo de acercarnos al Bierzo a través de la mirada del vino y las excelencias de sus particulares variedades de uva; el godello y la mencía.
Afortunadamente la oferta en El Bierzo relacionada con el enoturismo es creciente día a día y el abanico de posibilidades amplio.
Podíamos habernos acercado a alguna de las numerosas bodegas que ofrecen la posibilidad de visitas programadas con cata de vinos incluida. Esta buena alternativa queda pendiente para hacerla en otro momento. Los fabulosos días de sol y buena temperatura que estamos teniendo invitaban a un paseo y a una actividad algo más en contacto con la naturaleza.
La cosa no pudo ser más redonda ya que nos pusimos al habla con Jorge Vega de la bodega «La Puerta del Viento» y nos propuso realizar un recorrido enoturístico por «Castroventosa» (la antigua ciudad astur y romana). Además de la visita a este importante conjunto monumental e histórico del noroeste español, la propuesta se complementaría con un paseo por los viejos viñedos que hay en las cercanías del mismo. Allí y a pie de campo nos acercaría a las particularidades y singularidades de los cepas bercianas.
Jorge actuó como perfecto anfitrión. Nos desveló parte de la historia y leyendas que atesora el Castro así como su íntima relación con el paisaje. Un paisaje que forma en su entorno un auténtico y formidable «mar de viñas».
En Castroventosa la historia y la cultura del vino se fusionan y adquieren un tono mítico y de leyenda.
Después de nuestro especial paseo por las viñas nos acercamos hasta Cacabelos para hacer una visita obligada a otro símbolo berciano, «La Bodega del niño».
Después de un rico vino cosechero y con la magia de la música de Serrat de fondo, nos fuimos hasta otra institución local del pueblo, «El mesón del Apostol». Un restaurante que ha apostado por la Cultura del vino y forma parte de la asociación berciana de Enoturismo.
Allí pudimos degustar un excelente menú perfectamente maridado con los vinos que elabora Jorge en su pequeña pero ya prestigiosa bodega «Puerta del Viento».
Previamente y como no podía ser de otro modo nos presento y dió a probar tres de sus vinos estrella; el godello con unos meses de roble, el mencía joven y el crianza. Todos ellos excelentes recolectores de una sabiduría ancestral y un buen hacer que se fusionan perfectamente con los gustos de hoy día.
Gracias a la bodega «Puerta del Viento» por hacernos disfrutar de ellos en buena compañía.
¡Salud!
GALERÍA DE IMÁGENES
http://bodegaspuertadelviento.com/
Otro día se abre en El Bierzo.
Un haz de luz y unas brisas de valle y de montaña
se deslizan entre sus viñedos.
La tierra recibe al orvallo rezagado.
Las vides se engalanan de ocres, rojos y pardos.
La claridad y el aire avanzan, conquistando la atalaya.
Rodean murallas, reinventan torreones, imaginan calles transitadas.
La Peña del Castro dibuja la Bérgida prerromana.
Coge impulso la brisa, se arremolina;
al Oeste, la Puerta del Viento la espera…