El Camino Olvidado o Camino Viejo de Santiago a su paso por El Bierzo

por Rosa&Javier

  «Por Fasgar fuimos al paso alto entre dos montañas, donde rezamos a Santiago en su ermita, que allí hicieron para agradecerle haber vencido a los moros. Bajamos por las Colinas del Moro y sus lomas rojas, hasta la cruz alta donde todos los peregrinos dejaron un canto como recuerdo».

(extraído de Julián González Prieto, en sus obras Vexu Kamin y Pai Frolanus (Ediciones Monte Casino 2004 y 2006 respectivamente, haciendo mención a un archivo privado denominado Carta de Gundisalvo a Froilano, fechado en el año 1002, el cual nos habla de un viejo camino a Santiago).

camino olvidado o viejo

De igual manera que se dice “todos los caminos llevan a Roma”, podríamos afirmar que “todos los caminos conducen a Santiago”, pues tal es la enormidad de los posibles caminos y rutas que llevan a Santiago desde todos los confines, algunos más conocidos que otros. Estas rutas históricamente se han venido realizando no ya sólo como peregrinación o comercio, sino también como travesía, aventurera, viaje, ruta turística o simple excursión.

El Viejo Camino de Santiago, Camino de la Montaña o Camino Olvidado, es una ruta jacobea del Norte de España, que durante la Edad Media fue utilizada de forma habitual para que los peregrinos, llegados de todas partes, pudiesen protegerse mejor de las hordas musulmanas de Almanzor. A medida que la Reconquista avanzaba sobre los reinos musulmanes, este Camino fue perdiendo peregrinos a favor del Camino de Santiago Francés, hasta su total olvido en épocas posteriores. Actualmente, este camino ofrece un paisaje único y especial,  y cada vez más personas lo recorren durante todo el año, pues se está señalizando y acondicionando para los peregrinos que decidan recorrerlo.

Históricamente, el Camino viejo comenzaba en Bilbao y terminaba en Cacabelos. Se recorrían aproximadamente 637 Kilómetros de distancia, llegando a Santiago de Compostela en apenas una semana, enlazando con la ruta francesa.

Flechas en El Camino Viejo

Flechas en El Camino Viejo

En el tramo del Viejo Camino de Santiago en El Bierzo, recorreremos  60  km, desde Colinas del Campo a Cacabelos.  Si realizamos esta ruta, es de obligado recibo buscar las señales que los peregrinos fueron dejando a lo largo del camino. En este tramo del antiguo Camino de Santiago existieron y aún se conservan un gran número de monasterios, ermitas, e incluso un hospital de peregrinos entre Cobrana y Congosto, así como un Santuario donde se ganaba el jubileo, el de la Virgen de la Peña y como emblema la Cruz Cercenada (mutilada por Almanzor), de la que la Cruz de Ferro es copia equivalente.

Entre los monasterios que no debemos perdernos en el Bierzo, encontramos los siguientes: El de San Martín, con necrópolis, en la Cruz Cercenada, Santa Leocadia en Quintana, San Fructuoso en Labaniego, en Losada el de San Pedro y San Pablo, el Santuario de la Virgen de la Peña en Congosto y, en Bárcena y Posada, los de San Salvador y San Julián respectivamente. Como ermitas, en cuyos pórticos pernoctaban los peregrinos, destacan la de Santiago en una campa en el monte de los Mozones de Quintana y Boeza, en Quintana la de Santiaguiño, San Adrián, Santa Lucía, el Santo Cristo y San Esteban en Fuseros, y, otras, el Santo Cristo en Losada y la Virgen de la Vega en Cabanillas y San Justo.

Campo de Santiago

Campo de Santiago

El Camino por tierras bercianas comienza en Fasgar y, ya sin carretera, continúa hasta Campo de Santiago donde se levanta una ermita en su honor, ya que fue el lugar donde se dice que el apóstol Santiago apareció en los cielos montando un caballo blanco y puso en fuga a los árabes que allí libraban batalla con las tropas cristianas. Desde Campo descendemos por una senda hasta Colinas, localidad declarada Conjunto Histórico-Artístico y, con el título de uno de los nombres de pueblo más largo del territorio nacional: Colinas del Campo de Martín Moro Toledano. Este nombre procede de una antigua leyenda, dicen que las tropas agarenas estaban bajo las órdenes de Martín Moro, natural de Toledo. Merece la pena recorrer con tranquilidad sus calles empedradas y peatonales para disfrutar de su rico patrimonio arquitectónico, visible en cada uno de sus rincones.

Siguiendo el curso del río Boeza se continúa hasta Igüeña,  y de allí a Quintana de Fuseros, conocida como la antigua ciudad templaria de Taurón, reconstruida por éstos para proteger a los peregrinos de los musulmanes. Entre Igüeña y Quintana hay un paraje denominado “La Cercenada”, donde estuvo el monasterio de Santo Martino, cuyo nombre conserva un arroyo.  Actualmente, aún se encuentran huellas de una antigua necrópolis. La famosa Cruz Cercenada, se hallaba entre Igüeña y Quintana, junto al monasterio de San Martino.

 Desde allí, la ruta sigue por Cabanillas y San Justo de Cabanillas. En este pueblo, es muy interesante observar en su iglesia un antiguo miliario romano, testimonio de la existencia de un antigua vía romana.

Iglesia de Santiago y olivo

Iglesia de Santiago y olivo

Desde San Justo, se avanza hasta Labaniego, un pequeño pueblo berciano con mucho encanto y vestigios del viejo camino por todos los rincones: la iglesia de Santiago escoltada por sus olivos centenarios, con una antigua talla de madera del apóstol peregrino, recogida actualmente en el “Museo de los Caminos” en Astorga; también se pueden apreciar los restos del antiguo convento de San Fructuoso,  antigua parada de peregrinaje, situados en la espesura del bosque, en la frondosidad de un robledal de belleza ancestral. Muy cerca del monasterio, en uno de los parajes del pueblo conocido como “La cerca” se encuentran muros de piedras, restos de antiguos asentamientos aún sin datar de forma concreta, y que se cree pueden ser del poblado original de Labaniego, con un antiguo cementerio y recinto del ganado de este monasterio. Merece la pena parar y descubrir tan enigmáticos y misteriosos rincones.

Desde Labaniego, muy pronto el camino lleva a Arlanza, donde merece la pena visitar su molino restaurado en el río Noceda y un antiguo lagar reconstruido u ubicado junto a la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.

El siguiente pueblo del recorrido es Losada, antes de entrar al mismo se aprecia la bella ermita del Santo Cristo, recientemente restaurada. A su salida, está Rodanillo, con su iglesia de San Benito. A este pueblo le llaman el pueblo de los carros o de los carreteros, ya que antiguamente había varios talleres dedicados a esta profesión.

Atravesando uno de los alcornocales más septentrionales de España, se llega a Cobrana. En este pueblo, en la esquina de la iglesia de  San Tirso, podemos apreciar un viejo cilindro de granito, posiblemente un miliario romano pero sin inscripciones.

Siguiendo camino, en Congosto, pasando al lado de la ermita del Sto. Cristo,  hay una magnifica vista del Santuario de la Virgen de la Peña, patrona del Bierzo Alto. Aquí disponían los peregrinos de un alberge y también podían ganar el jubileo en la antigua ermita. Subir supone encontrar un magnifico mirador para contemplar El Bierzo y el pantano de Bárcena, que recoge las aguas del rio Sil.

Pantano de Bárcena

Pantano de Bárcena

Bordeando obligatoriamente este pantano, se llega a la presa de Bárcena. Saliendo del Bierzo Alto, pasamos por las poblaciones de San Andrés de Montejos y Columbrianos. A escasos metros nos encontraremos con la ermita de San Blas y San Roque, lugar donde se contacta con el más transitado y conocido Camino Francés y se deberá seguir su señalización para llevar a los peregrinos a Santiago de Compostela. Para este enlace, podemos elegir tres alternativas: 5  km. a Camponaraya, 11 a Cacabelos o 18 a Villafranca del Bierzo.

El llamado Camino Francés no es un camino natural, espontáneo, sino un camino buscado, por razones de utilidad comercial y bélica. Leyendo el texto del Códice Calixtino, donde se habla de él, se llega entonces a la siguiente conclusión: para llegar a Compostela había otras alternativas, múltiples caminos, y variantes que enlazan dentro de ellos. Si hacer el Camino de Santiago es hacer la Peregrinación Jacobea, por las motivaciones personales que cada uno tenga, no importa el camino a seguir.

 Tanto las instituciones, ayuntamientos como las pedanías por los que discurren estas rutas deberían hacer un esfuerzo por mostrarlas, potenciarlas y enseñarlas o, al menos, señalizarlas. Desde aquí, animamos a los potenciales peregrinos a probar y experimentar antiguos caminos para conocer rincones y parajes inolvidables por el Bierzo en su camino a Santiago de Compostela. ¡Hagamos que el Camino olvidado del Bierzo deje de dormir en el olvido!

El Camino Olvidado

En este gráfico se ven los pueblos que atraviesa el Camino Olvidado, las distancias kilométricas a Santiago de Compostela y el espacio recorrido dentro de este camino hasta enlazar en Cacabelos con el Camino Francés:

Colinas del Campo de M. Moro

León

253

60

Igüeña

León

246

53

Quintana de Fuseros

León

237

44

Cabanillas de S. Justo

León

235

42

S. Justo de Cabanillas

León

233

40

Labaniego

León

228

35

Arlanza

León

226

33

Losada

León

224

31

Rodanillo

León

222

29

Cobrana

León

217

24

Congosto

León

215

22

S. Andrés Montejos

León

205

12

Columbrianos

León

204

11

Fuentes Nuevas

León

201

8

Camponaraya

León

199

6

Cacabelos

León

193

0

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Más información: 

http://elcaminoolvidado.blogspot.com.es/

sendas de misterio y enigmas – El Camino Olvidado

El Camino ‘olvidado’ de Santiago por El Bierzo Alto reclama el paso peregrino

Casas Rurales en » EL CAMINO OLVIDADO»

Casa rural

Casa rural «La Nogala» en Labaniego

Todos nuestros alojamientos curiosa y afortunadamente se encuentran ubicados en este «Camino Viejo de Santiago».

Para ayudar a potenciar y recuperar esta vía,  ofrecemos a los futuros peregrinos que recorran este camino alternativo por El Bierzo, la posibilidad de pernoctar en nuestras casas  con algún tipo de descuento sobre las tarifas oficiales.

Os invitamos a conocer un poco mejor dichos alojamientos y su ubicación dentro del Camino.

CASA «LA NOGALA» en Labaniego (4 plazas)

CASA»LA GÁNDARA» en San Justo de Cabanillas (4 plazas)

CASA «LA ESCRITA» en Arlanza (2-3 plazas)

*Es preferible reserva previa de la casa y consultar condiciones

DE LABANIEGO A TEDEJO

Ruta de los castros

RECORRIDO – 9 kilómetros
DURACIÓN – de 2 a 3 horas
DIFICULTAD – baja

CAMINO DE IDA:

Salimos de Labaniego por el camino a la izqda al final del pueblo. Enseguida llegamos al lugar donde se está edificando «La Casa del Bosque», uno de los eco-museos del proyecto museístico «Las Casas del Hombre». Este primer tramo transcurre entre gran variedad de especies vegetales: castaños, encinas, pinos, madroños, robles, etc.

Unos trecientos metros más adelante dejamos atrás un sendero a la derecha que se interna en el bosque, y que transita los lugares donde se hallaba el monasterio de S. Fructuoso de Labaniego. Hoy día solo podemos ver restos de los muros de la edificación.
Continuamos por el precioso camino entre robles hasta salir a una zona más abierta cubierta de matorral.  Un poco más adelante tomamos un camino a la derecha, que nos vuelve a internar en el bosque.  Cruzamos un pequeño arroyo y seguimos por el camino.

La siguiente referencia es una pista ancha que seguimos a la derecha. Enseguida abandonamos la pista y continuamos a la izquierda en ascenso hasta un cruce de pistas forestales. En primer término, encontramos junto a un mojón de montes, una pista que enlaza enseguida en otra principal. La tomamos hacia la derecha en sentido ascendente. Unos metros más adelante y a la derecha tenemos buenas vistas sobre los castros (el de el Cocotín en primer término y más atrás el de la Escrita).

Atravesamos las antiguas tierras de labor, hoy reforestadas con pino, castaño y cerezo. Un poco más adelante, dejamos atrás una pista que sale a la derecha y que va hacia el pueblo de S. Esteban. Seguimos subiendo alcanzando en pocos minutos un alto donde hay un nuevo cruce de pistas. Cogemos la que tira hacia abajo de frente nuestro.  Desde aquí tenemos muy buenas vistas del Valle del Boeza y Bembibre.

Continuamos nuestro descenso por la ladera del monte y pronto alcanzamos  a ver el pueblo de Tedejo, en su privilegiada situación de solana orientado al sur.  Hay una fuente con pilón a la entrada del pueblo, en la que echar un trago y refrescarnos.

Croquis de la rutaCAMINO DE VUELTA:
Salimos de Tedejo por la C/ del Campo que es una perpendicular a la C/ del Medio. El camino es ancho y asciende progresivamente por la ladera. Al llegar a una curva dejamos atrás un camino que sale a la derecha y que va a El Valle. Continua nuestro ascenso entre encinas, escobas y brezo por el monte con buenas vistas del pueblo y entorno.

Tras un kilómetro y medio llegamos a un alto donde hay un cruce de pistas junto a un mojón de montes. Hacia la derecha iríamos dirección hacia el castro de Tudela (castro prerromano). Nosotros seguimos rectos de frente, por la pista más ancha, en suave ascenso en un primer tramo, salvando un repecho para descenderlo a continuación y bajar hacia el valle de Labaniego.

También aquí las tierras de labor se han reforestado ante su abandono formando hay día ya hermosos bosques de especies variadas. Dejamos atrás un cruce de una pista que sale a la derecha y seguimos bajando. La próxima referencia, es una fuente forestal con pilón, junto al camino, que invita a descansar un rato. Continuamos la marcha internándonos en un robledal. El camino se hace más agradable y pronto alcanzamos con la vista delante nuestro el pueblo de Arlanza y los castros de El Cocotín y de La Escrita un poco más a la izquierda.

Llegamos al cruce de pistas que ya encontramos en el camino de ida a Tedejo. Coincidimos durante unos 60 metros con parte del recorrido de la ida. Ahora dejamos atrás el desvío a Tedejo que tomamos a la ida a nuestra izquierda para continuar por la pista principal y siempre en descenso.

El camino es ancho y recorre el corazón del bosque de Labaniego paralelo al arroyo Rodicós, que desemboca más abajo en el río Noceda.  Al llegar a un cruce tomamos el camino que sale a la derecha. Este camino nos conduce hasta Labaniego enseguida tras una pequeña subida y dejar atrás algunos huertos y el futuro Eco-museo.

Para ayudar a seguir esta ruta y no desviarse del camino correcto, puede ayudar aparte de las indicaciones por escrito y mapa de la ruta, la señalización en color naranja que acompaña el recorrido pintada en piedras y árboles.

OPCIONES: si teneís interés y tiempo, es buena idea acercarse a alguno de los castros que bordea el recorrido (el Cocotín, la Escrita y el de Tudela). Los accesos seguramente no serán fáciles ni están marcados.